Como ningún otro, el Arlequín es un ser humano que busca y se cuestiona, caracterizado por la constatación: Dos almas habitan en mi pecho, en la eterna búsqueda del verdadero amor.
Estilísticamente unido a su amada, el artista Don Alberto Carlos creó
el pequeño Escultura de bronce Arlequín y Dama enamorada.